Después de un divorcio, las parejas se enfrentan con el desafío de redefinir no sólo sus vidas de manera separada, sino también los aspectos económicos y la situación de sus hijos. Las medidas establecidas pueden sufrir variaciones a lo largo de los años, cuando ocurren cambios significativos en las circunstancias de alguno de los progenitores, surge la posibilidad y necesidad de ajustar las condiciones del convenio o la sentencia de divorcio.
La modificación de medidas
Por todo ello, estas medidas pueden sufrir variaciones a lo largo de los años, cuando ocurren cambios significativos en las circunstancias de alguno de los progenitores, surge la posibilidad y necesidad de ajustar las condiciones del convenio o la sentencia de divorcio. ¿Cuáles son los requisitos esenciales para iniciar este proceso? ¿Qué situaciones comunes suelen motivar estas modificaciones? ¿Cómo se puede presentar una demanda de modificación de medidas con éxito?
Existen dos vías principales para iniciar este procedimiento:
Modificación de medidas de mutuo acuerdo
En este proceso, las partes redactan un nuevo convenio regulador con su consenso y aprobación. Estas nuevas condiciones se presentan ante el juez para su aprobación y pueden entrar en vigor desde el momento de la firma si así lo acuerdan las partes.
Modificación de medidas por la vía contenciosa
Si no se logra un acuerdo, se inicia un proceso contencioso ante los tribunales, en el que cada parte presenta sus argumentos y pruebas para demostrar la existencia de nuevas circunstancias y la necesidad de cambiar las medidas establecidas previamente. En este caso, el juez será
quien modifique las medidas relacionadas con los hijos, pensiones alimenticias o el uso de la vivienda familiar.
Requisitos para realizar este procedimiento con éxito
Para iniciar el proceso de modificación de medidas, es fundamental que haya ocurrido un cambio sustancial en las circunstancias desde la aprobación del convenio regulador o la sentencia. Estos cambios deben ser permanentes o estables en el tiempo y no pueden ser
creados intencionalmente para beneficiar a alguna de las partes. Además, deben poder ser debidamente acreditados. Existen varios escenarios frecuentes que pueden llevar a la modificación de medidas, como cambios en la custodia, pensiones alimenticias, domicilio, régimen de visitas, incumplimientos reiterados y convivencia con otra persona.
Duración del juicio de modificación de medidas
La duración del juicio puede variar según la carga de trabajo del juzgado y la complejidad del caso. En promedio, puede tardar entre cuatro y seis meses, aunque se pueden solicitar medidas provisionales que agilicen el proceso.
¿Cómo presentar una demanda de modificación de medidas?
Para presentar una demanda de modificación de medidas, es necesario contar con la representación de un procurador y la asistencia de un abogado. La demanda debe ser aprobada por resolución judicial y puede presentarse de manera mutua o contenciosa, dependiendo del
acuerdo entre las partes.
En resumen, la modificación de medidas tras un divorcio es un proceso que busca adaptar las condiciones de convivencia a nuevas circunstancias. Es importante seguir los pasos adecuados y contar con el asesoramiento legal necesario para garantizar que los cambios se realicen de manera justa y equitativa para todas las partes involucradas. Contacta con nuestro despacho de abogados, especializados en esta materia, para asesorarte y tramitar un procedimiento con un resultado con éxito.
